A toda marcha se trabaja en la construcción de terraplenes y cajones de hormigón para las obras de saneamiento y la fabricación del pretil para la posterior instalación del enrocado, que dará firmeza a la obra.
Así lo verificó en terreno, el subsecretario de Obras Públicas, Sergio Galilea en una rápida visita inspectiva a Chiguayante. “Estamos hablando de una carretera de alto estándar y que va a tener además -por la condición ribereña en la que se encuentra- iluminación, semaforización y elementos de seguridad. Además, va en el borde del río, por tanto, el trabajo de enrocado para que esto no sea inundable, es probablemente la condición principal que debemos asegurar”.
El seremi de Obras Públicas, René Carvajal recalcó la importancia de las actuales faenas. “Lo que se está haciendo es una intervención de protección de lo que se va a construir. Aquí se va a hacer un camino de aproximadamente de 4 kilómetros, que va a borde del río, por lo que necesita una protección que se conoce como enrocado”.
El alcalde Antonio Rivas, por su parte, agradeció el interés del gobierno central por conocer los avances de una obra que le permitirá a la comuna una gran proyección. “Tenemos en esta obra muchos sueños instalados, tanto de inversión pública como privada. Yo creo que esa es la mejor sintonía para que las ciudades se desarrollen”.
Cabe indicar que este megaproyecto contempla la construcción de una calzada simple bidireccional, desde calle Pascual Binimelis hasta el Nudo 8 Oriente, con una longitud de 4 kilómetros. La inversión total alcanza los $17 mil 887 millones. Se espera que esté operativa en julio de 2017.
